Ninguna de las explicaciones que sobre la huelga magisterial dio la ministra de Educación Marilú Martens a los congresistas participantes de la sesión de la Comisión de Educación, el miércoles último, logró satisfacerlos. El siguiente paso, según la moción multipartidaria presentada esta tarde por la bancada de Fuerza Popular, será interpelarla.
De prosperar el pedido, como se prevé, le harían 40 preguntas más relacionadas al presupuesto para el sector Educación, las medidas de prevención ante la huelga de maestros, los recursos que se piensa destinar para remuneraciones, los acuerdos con dirigentes de maestros, entre otros aspectos que ya fueron explicados ante la Comisión.
También se le solicita en el pliego interpelatorio exponer las medidas concretas para mejorar la calidad de la educación y un “balance autocrítico”.
De acuerdo con lo que manifestaron los integrantes de la Comisión de Educación en la sesión de la víspera, la consigna parece ser lograr la censura de la ministra, pues en reiteradas intervenciones le solicitaron que dé “un paso al costado” cuando no abiertamente que se vaya.
Firman el documento Héctor Becerril y Daniel Salaverry por Fuerza Popular, así como Marco Arana, Jorge Castro y Justiniano Apaza, por el Frente Amplio. Una alianza impensada que se suma a la aparición el miércoles también del congresista Becerril en la conferencia de prensa que brindó el líder sindical Pedro Castillo, a quien se le atribuye vínculos con los grupos prosenderistas Proseguir y Movadef.

GIROS INESPERADOS
La aparición del congresista fujimorista en la conferencia docente fue sorpresiva, toda vez que se identifica a su agrupación por realizar siempre un deslinde claro con el prosenderismo y senderismo, atribuyéndose todos los éxitos de la lucha antiterrorista en los años 90, así como la captura del cabecilla terrorista Abimael Guzmán, a quien Movadef y Proseguir han declarado su admiración y solicitan su liberación.
El propio congresista Becerril, en una entrevista periodística en enero de este año, señaló la necesidad de bloquear el ingreso al aparato del Estado a cualquiera que militase en esas agrupaciones.
“Recuerden lo que dijo su líder Abimael Guzmán cuando lo capturaron. El sostuvo que su detención “era un recodo en el camino”. Ese recodo significa que ellos van a pretender, de una u otra manera, continuar queriendo destruir el país y el Estado de derecho. Entonces, para lograr eso, ellos crean organizaciones como el Movadef [Movimiento por Amnistía y Derechos Fundamentales], el Fudepp [Frente de Unidad y Defensa del Pueblo Peruano], además de otros movimientos para pretender, de esa manera, ingresar en la vida política y no porque hayan cambiado su forma de pensar”, decía entonces Becerril.
Al respecto aseguró: “Por eso es importante que haya una ley que, en forma taxativa, finalmente impida que postulen a cargos de elección popular y en otro caso puedan acceder a trabajos en el sector público”.
Específicamente sobre la infiltración prosenderista entre los maestros se pronunció aquella vez el congresista Becerril: “Hasta en el Magisterio, a pesar de que hay una ley expresa, están metidos. Entonces tiene que legislarse porque no hay una ley que lo prohíba”.
Para entonces, en realidad, ya existía la Ley N°29988, publicada en 2014, que establece medidas extraordinarias para el personal docente implicado en delitos de terrorismo.